Cristóbal Ojeda Dávila
Músico y compositor quiteño nacido el 26 de junio de 1910, hijo del Dr. Ramón Ojeda V. y de la Sra. Leonor Dávila.
Desde muy temprana edad, al tiempo que realizaba sus primeros estudios en la Escuela de los Hermanos Cristianos del Cebollar, empezó a manifestar su fuerte vocación musical, por lo que sus padres, cuando cumplió los 11 años de edad, hicieron las gestiones necesarias para que pueda ingresar al Conservatorio Nacional de Música, donde al poco tiempo se destacó por su gran talento y dedicación.
Entre sus composiciones musicales más notables se destacan los pasillos «Alejándose» y «Ojos Negros», con letras de Angel Leonidas Araujo; y el inmortal «Alma Lojana», con letra de Emiliano Ortega Espinoza.
Víctima de la fatalidad del destino, una bala perdida disparada durante la Guerra de los Cuatro Días acabó con su vida, en Quito, el 31 de agosto de 1932.