Dr. Francisco Javier Loyola

Clérigo y patriota cuencano de importante actuación durante las luchas por la independencia.

Ordenado presbítero el 6 de octubre de 1786, durante algún tiempo fue misionero en las regiones orientales donde extendió con devoción la doctrina cristiana entre los habitantes de esas apartadas comarcas.

Posteriormente fue nombrado párroco de Chuquipata (hoy Javier Loyola), y en el ejercicio de esas funciones levantó al pueblo y marchó sobre Cuenca para respaldar el movimiento insurgente del 3 de noviembre de 1820.

Con valor y ardorosa oratoria arengó al pueblo cuencano para que haga suyo el movimiento revolucionario iniciado en Guayaquil el 9 de octubre de ese mismo año, obligándolo a reaccionar contra el dominio español.