Dr. Manuel María Borrero
Abogado, escritor y repúblico nacido en la ciudad de Cuenca el 10 de mayo de 1883, hijo del médico Dr. José María Borrero Galup y de doña Luz González Córdova.
Luego de haber alcanzado con brillantez el bachillerato, ingresó a la Facultad de Leyes de la Universidad de Cuenca donde el 30 de noviembre de 1906, a los veintitrés años de edad, obtuvo el título de Abogado.
Ya desde 1904 había intervenido en política apoyando al presidente Lizardo García, por lo que a partir de 1906 fue duramente perseguido por el Gral. Eloy Alfaro. En 1912, luego del Asesinato de los Héroes Liberales fue nombrado Secretario de la Gobernación de Cañar y más tarde Ministro de la Corte Superior de Quito, cargo que desempeñó hasta 1921 en que fue nombrado Cónsul del Ecuador en Valparaíso, Chile, donde permaneció un año, luego de lo cual volvió para ocupar el cargo de Gobernador del Azuay, en el que actuó también sólo por un año.
Posteriormente fue Ministro Fiscal de la Corte de Cuenca y más tarde pasó a Quito para actuar como Ministro Juez de la Corte Suprema, cargo que desempeñó desde 1928 hasta 1935; además, desde 1932 fue Presidente de dicha corte. En agosto de 1938 asistió como Diputado a la Asamblea Nacional Constituyente reunida en Quito, la misma que, ante la renuncia del Jefe Supremo, Gral. Alberto Enríquez Gallo, lo nombró Presidente Constitucional interino de la República.
Elegido por dicha Asamblea, asumió los destinos del país el 20 de agosto de 1938 y tratando de realizar un gobierno de coalición nacional buscó colaboradores de gran prestancia para las diversas labores del gobierno; desgraciadamente, muy pronto se desataron las pasiones políticas y la Asamblea Nacional se convirtió en un torbellino que echó por tierra las buenas intenciones del presidente. Ante esas circunstancias y en beneficio de la paz, el 1 de diciembre de ese mimo año presentó ante la Asamblea la renuncia a su altísimo cargo.
Fue un escritor superlativo de cuya pluma brotaron obras que se destacan el arte literario y en la investigación histórica, las cuales, desgraciadamente, hoy han desaparecido de la circulación, tal es el caso de: “Album Funero”, “Cuestionario Jurídico”, “Reminiscencias Histórico Liberales”, “El Coronel Antonio Vega Muñoz”, “Quito, Luz de América”, “Un Centenario que Lacera Nuestra Angustia” y “Agua de Manantial”.
A la respetable edad de noventa y dos años, murió en la ciudad de Quito el 7 de junio de 1975.