Dr. Miguel Moreno Ordoñez
Notable poeta nacido en la hacienda Tutupali, en las cercanías de Cuenca, el 3 de marzo de 1851; hijo primogénito de don Manuel Moreno Aguirre y de doña Carmen Ordóñez y Veintimilla.
Sus primeros estudios los realizó en una pequeña escuela cuencana, y la secundaria en el Colegio Seminario donde terminó su bachillerato; finalmente ingresó a la Universidad de Cuenca, donde en 1876 obtuvo el título de Doctor en Medicina.
Ya desde su época de estudiante había empezado a desarrollar su gran inspiración poética, y para 1872 ya había escrito su célebre poema «Sábados de Mayo», en el que «hizo las leyendas de la tierra, glosó los sentimientos del pueblo, rimó los motivos campestres y cantó las coplas del barrio y las serenatas a la luz de la luna»; obra que fue publicada junto a Honorato Vásquez en un libro que bajo el mismo título recopilaba una selecta colección de versos de los dos amigos y poetas. La primera edición de esta obra fue publicada en 1877, la segunda en 1907 y una tercera en 1977.
Luego de obtener el título de Doctor viajó al Perú donde ejerció su profesión de médico hasta 1882, en que volvió a Cuenca para iniciar una intensa y abnegada vida dedicada a servir a sus semejantes con caridad y patriotismo. Emprendió entonces la ímproba hazaña de reedificar templos, levantar nuevos altares y dar esplendor al culto, e hizo suya la empresa de erigir el templo del Santo Cenáculo, como un acto de amor y reparación a la Santísima Eucaristía.
En su labor de caridad se entregó todo entero al amor de los demás: Sació el hambre de los niños desvalidos y alimentó y vistió a los desheredados; curó las heridas ajenas, y como si esto fuera poco, a las víctimas de la venganza partidista las devolvió con piedad al seno de la tierra, tal cual hizo con el Crnel. Luis Vargas Torres, fusilado en Cuenca en el año 1886.
En 1892 fue elegido Diputado por la provincia del Azuay al Congreso Nacional y Decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cuenca; y un año después, junto a su amigo de siempre, Honorato Vásquez, y con Cornelio y Remigio Crespo Toral, fundó la revista «La Unión Literaria», en la que colaboraron además las más notables y brillantes plumas del país.
Muertos tres de sus hijos, su esposa, y finalmente su padre, se entregó por largas horas a cultivar su inmensa pena, y fruto de esas horas de tragedia y de dolorosa inspiración escribió «El Libro del Corazón», que fue publicado en Madrid en 1907.
«Para hacerme comprender -dice Moreno- que no está aquí la ventura, Dios comenzó la obra de mi redención. Me quitó a tres de mis hijos, luego a mi amada compañera, cuya muerte fue como la mía misma, y a mi padre, el venerado maestro de mi vida; y me los quitó en breve tiempo, sin duda por caridad, para abreviar los días de mi martirio, compendiar el dolor en un solo trance supremo y demostrar cómo puede vivir hasta el árbol herido por el rayo…»
Por su imponderable acción social y religiosa, Su Santidad el Papa Pío X le concedió en 1907 la condecoración pontificia de Caballero de San Gregorio Magno. Dos años más tarde, para despedirse de la poesía publicó su libro «Morayma», escrito en unión de su hijo Miguel Angel Moreno Serrano.
Víctima de un trágico accidente, el Dr. Dn. Miguel Moreno Ordóñez murió en la ciudad de Cuenca, el 30 de agosto de 1910.