Huancavilcas

Importante pueblo indígena que durante el siglo XV ocupó las zonas aledañas a los ríos Daule, Babahoyo y Guayas y el golfo de Guayaquil, y que fue parte de la cultura Manteño-Huancavilca.

Fueron guerreros valientes que pertenecieron a la misma raza y cultura de los antiguos Mantas, y que se negaron decididamente, a través de su historia, a ser dominados o sometidos por otros pueblos.

Cuando Tupac-Yupanqui llegó a sus tierras tratando de ampliar sus dominios, le enviaron unos emisarios con la misión de pedir que les mandara una delegación de nobles y capitanes para que los instruyeran y educaran en su doctrina y cultura. Cuando éstos llegaron, los Huancavilcas los recibieron amablemente y con muestra de aparente gran júbilo, pero aprovechando un descuido de ellos, los aniquilaron a todos, y evitaron de esta manera ser dominados por los conquistadores peruanos.

Años más tarde, luego de heroica resistencia que ocasionó miles de muertes a los invasores Incas, fueron finalmente subyugados por Huayna-Cápac, quien para castigar su osadía ordenó que fuera degollada la décima parte de ellos.

Posteriormente, a la llegada de los españoles lucharon bravamente para defender sus tierras y costumbres, y en dos ocasiones destruyeron la recién fundada ciudad de Guayaquil. Finalmente y debido a la inmensa superioridad militar de los españoles, los huancavilcas fueron vencidos y tuvieron que capitular, pero imponiendo de todas maneras sus condiciones: “Puesto que tenéis de dónde sacar tantos hombres, traed también mujeres que les acompañen, y así viviremos en paz, porque dejaréis tranquilas a las nuestras.

Esta heroica raza, la dueña de nuestra hermosa provincia cuando llegaron a ella los españoles, extinguióse poco a poco, desapareciendo sus últimos representantes en el año fatal de 1589, durante el cual, una peste de origen desconocido, posiblemente la viruela, diezmó la ciudad y sus poblaciones circunvecinas” (J. G. Pino Roca.- Leyendas, Tradiciones y Páginas de la Historia de Guayaquil, Tomo I, p. 57).