Tola Luis de la

DE TOLA Y AVILES, Obispo Luis.- Religioso guayaquileño nacido el 25 de marzo de 1811, hijo de don Angel José Vicente De Tola y Salcedo y de doña Catalina Avilés y Carbo.

Era muy joven cuando le tocó vivir en Guayaquil la heroicaRevolución del 9 de Octubre de 1820, y dos años más tarde, cuando el Gral. Juan Illingworth fundó la Escuela Náutica de Guayaquil, a pesar de sólo contar 11 años de edad fue uno de los primeros en ingresar a ella junto a otros jóvenes guayaquileños que habrían de escribir páginas brillantes en la historia de nuestra patria: José María Urbina, Francisco Robles, José Rodríguez Labandera, José Antonio Gómez, Francisco Calderón Garaicoa, y muchos más con quienes a bordo de la pequeña goleta  “Guayaquileña”, en 1828 tuvo destacada actuación en el Combate Naval de Malpelo, durante la guerra Perú-Grancolombiana.

Posteriormente ingresó al ejército en calidad de artillero, y lleno de amor cívico continuó sirviendo militarmente a la patria libre y a la recién creada República del Ecuador. En 1835, ya con el grado de Capitán fue asignado por el Presidente de la República, Dr. Vicente Rocafuerte, para que lo acompañe como su edecán.

Aguirre Ilmo. José Tomás

Pese a su condición de militar, pudo en él más su vocación religiosa, y luego de recibir la Tonsura y las órdenes menores de manos del primer Obispo de Guayaquil, Francisco Javier de Garaycoa y Llaguno, el 22 de marzo de 1839 fue ordenado Presbítero, y desde ese día se dedicó totalmente al servicio de Dios y de la educación.

Durante la terrible epidemia de fiebre amarilla que en 1842 azotó la provincia y especialmente la ciudad de Guayaquil, realizó una abnegada labor humanitaria en hospitales y hogares, socorriendo a los que habían sido atacados por dicho mal.

Asistió como Senador al Congreso que se reunió para el período 1853-57, y en 1860 fue nombrado Consejero de Estado. En enero de 1862 fue designado Vicario General de la Diócesis, y el 15 de noviembre de 1863 el obispo José Tomás de Aguirre lo consagró Obispo Auxiliar de Guayaquil.

En 1865, luego de que algunos de sus viejos compañeros de la Escuela Náutica fueron fusilados por orden de García Moreno, por haber intervenido en un intento revolucionario, él también fue considerado por el mandatario como un fuerte conspirador, por lo que tuvo que abandonar el país para evitar ser ultrajado.

Tiempo después retornó, y en 1867, cuando don Pedro Carbo -que presidía el Congreso- se empeñó en crear una universidad en Guayaquil, y expidió el decreto respectivo creando una junta para tal objeto, fue elegido, el 1 de diciembre de ese mismo año, para desempeñar el cargo de Rector de la Junta Universitaria del Guayas.

En 1869 viajó a Roma para asistir al Concilio Ecuménico Vaticano, y a su regreso fue nombrado, en 1871, Obispo de la recién creada diócesis de Portoviejo, ciudad en la que ejerció su abnegada misión pastoral hasta 1875, en que -luego del Asesinato de García Moreno- renunció a dichas funciones por sufrir una grave enfermedad. El Papa lo autorizó entonces a gobernar la diócesis de Guayaquil para que pueda atender su salud, pero continuó insistiendo en su renuncia, la que finalmente, en 1881, le fue aceptada por el Papa León XIII.

Luego de una larga vida consagrada al servicio de sus semejantes, murió en la ciudad de Guayaquil el 11 de agosto de 1887.

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Tola Luis de la puedes visitar la categoría Religioso Guayaquileño.