Provincia de Loja
En la antigüedad, los territorios de la actual provincia de Loja estuvieron habitados por asentamientos indígenas Paltas, razón por la cual se llamó a estas regiones “Tierra de los Paltas”; a esta etnia se sumaban también los Malacatos. Su parte oriental estuvo poblada por tribus feroces y salvajes, por lo que el padre Juan de Velasco, en su “Historia del Reino de Quito” la llamó “La Feroz Nación de los Jíbaros”
A los pocos años de la llegada de los españoles y luego de la fundación de Loja, en 1546, estos avanzaron hacia el oriente e integraron la Gobernación de Yaguarzongo, donde fundaron poblaciones como Valladolid, Santa María de Nieva, Borja y otras más que, lamentablemente, desaparecieron por el abandono.
Proclamada la independencia, la provincia de Loja fue creada de acuerdo con la Ley de División Territorial de Colombia del 25 de junio de 1824, dictada por el Gral. Francisco de Paula Santander.
Tiene una extensión aproximada de 11.140 km2, y limita al norte con la provincia del Azuay, al sur con la República del Perú, al este con Zamora-Chinchipe y al oeste con El Oro.
Su capital es la ciudad de Loja y está integrada por los cantones Calvas (Cariamanga), Catamayo (La Toma), Celica, Chaguarpamba, Espíndola (Amaluza), Gonzanamá, Loja, Macará, Olmedo (Santa Bárbara), Paltas (Catacocha), Pindal, Puyango (Alamor), Quilanga, Saraguro, Sozoranga (Rodríguez Lara) y Zapotillo.
A pesar de ser una provincia andina su orografía no presenta elevaciones de mucha importancia, aun así se destacan el Fierro-Urcu (3.788 m), el Villonaco (2.950 m) y el Coposo (2.600 m), en cuya cima, el 24 de mayo de 1981 se estrelló el avión presidencial del Abg. Jaime Roldós Aguilera, perdiendo la vida el mandatario, su esposa y toda la comitiva que lo acompañaba.
Su territorios es muy irregular y montañoso y está regado por numerosos ríos como el Puyango, el Alamor, el Malacatos, el Macará, el Calvas y el Zamora; entre otros.
Loja es una provincia privilegiada en cuanto a sus valles se refiere. Su capital está situada en el valle de Cusibamba, que quiere decir “Valle de las Flores” o “Vergel Risueño y Florido”; al sur de la ciudad de Loja está el valle de Vilcabamba -cruzado por los ríos Chamba y Uchina- cuyo nombre significa “Valle Sagrado”, el mismo que logró fama mundial por la benignidad de su clima y por la longevidad de sus habitantes, que en su mayoría son inmunes a las enfermedades cardiovasculares y a la arteriosclerosis. Se destacan también los valles de Piscopamba, Gonzanamá y Cariamanga; de climas agradables y tierras fértiles y productivas, dedicadas en su mayor parte a la agricultura y la ganadería.
La provincia de Loja basa su economía en la agricultura, la ganadería y el comercio; y anualmente se realizan en ella varias e importantes ferias de integración fronteriza que garantizan y confirman su desarrollo.