Universidad Pontificia De San Gregorio Magno
Fue fundada en Quito por los padres jesuitas, el 15 de septiembre de 1622, para poder ampliar y continuar los estudios que se realizaban en el Colegio Seminario de San Luis, regido por los mismos religiosos.
Funcionó hasta el año 1786 en que el rey Carlos III decidió fundirla con la de Santo Tomás, de los padres dominicos, creando entonces un nuevo establecimiento: la Universidad Pública, que tuvo sus puertas abiertas hasta los albores de la independencia, en que fue clausurada debido a que sus alumnos se vieron involucrados en perturbaciones de orden político.